Desde el pasado 3 de diciembre del 2018 es de aplicación en Europa el Reglamento (UE) 2018/3021. Este reglamento tiene por objeto suprimir cualquier barrera tecnológica que tenga por finalidad impedir, dificultar o discriminar a los clientes que persiguen la compra de un bien o el disfrute de un servicio de contenido digital por razón de su nacionalidad, lugar de residencia o lugar de establecimiento.
La Unión Europea terminó hace bastante tiempo con las fronteras físicas para los ciudadanos comunitarios. Gracias a esto, puedes comprar cualquier producto en cualquier país europeo sin necesidad de declarar nada cuando llegues a la frontera. Sin embargo, el geobloqueo hace que esos derechos de los ciudadanos europeos no se apliquen en Internet (compra on-line), y nos encontremos en situaciones en las que el vendedor bloquea nuestro acceso al detectar la IP y nos redirige a la tienda española.
Pues bien, con la entrada en vigor de este nuevo reglamento no estamos ante el fin del geobloqueo, pero sí se da un paso más para lo que se pretende, y ello se materializa, entre otras, en la implantación de las siguientes medidas:
- Prohibición de que se pueda excluir a clientes que visiten la tienda on-line desde países diferentes a aquél en el que esté establecido el sitio web. Esto significa que ahora los clientes no podrán ser redirigidos a la tienda on-line del país desde el que estén consultando la página web.
- Se debe permitir que cualquier cliente de la UE pueda comprar en una tienda on-line independientemente de su país de residencia o de donde esté establecido. No obstante, el hecho de que los clientes de otros países de la UE puedan comprar en una tienda on-line (no establecida en el país desde el que la consultan) no significa que el propietario de la misma esté obligado a hacer envíos a estos países.
- Aceptación obligatoria de los pagos hechos por cuentas abiertas en otros Estados miembros. Es decir, No se podrán rechazar de forma automática tarjetas de crédito o débito ni otras formas de pago (autorizadas en el sitio web) procedentes de países específicos.
Todas estas medidas requieren de una revisión y posterior adecuación de los procedimientos de venta on-line (especialmente en los casos en lo que se venda a diferentes países de Europa), por lo que para cualquier cuestión al respecto no duden en contactar con nuestro departamento jurídico para que estudiemos su caso concreto y podamos dar solución a todas sus consultas.